Era una noticia de hace sólo unos días: “Ecuador necesita a medio plazo 5 .000 docentes para dar clase a nivel infantil, así como de primaria, secundaria y bachillerato, y un medio millar de docentes universitarios…”. El titular decía “Ecuador ofrece trabajo a docentes en España”. Quien nos lo iba a decir a los arrogantes españoles, que hace muy pocos años nos mostrábamos enfadados con la llegada de inmigrantes a nuestro país, un país que creíamos con una riqueza casi inagotable. Recuerdo la frase de “España va bien”, dicha con tal altanería y prepotencia que se exportó a todo el mundo ¿Y ahora qué? Se le podría decir a aquel político que tanto contribuyó a que aquella riqueza (efímera riqueza) se concentrara en torno a la construcción de viviendas. Al amparo de la misma se constituyó de forma paralela toda una legión de especuladores y unos banqueros irresponsables que dilapidaron la inagotable riqueza que aquel político postulaba en sus discursos. Y así llegamos al momento actual en el que encontramos un país arruinado y un nutrido grupo de ladrones que salpican las noticias de los medios de comunicación. Otros ladrones, más espabilados, están pasando desapercibidos porque dejaron bien preparada su salida del escenario especulador.
Pues bien, esta es la situación. Un país con un paro de un 26,26% tiene un gravísimo problema que debe atajar como sea. Y aquí viene mi reflexión y la noticia con la que comenzaba este post: estamos formando estudiantes para enviarlos al paro o para emigrar. Es decir, el estado español pone los fondos para formar a ciudadanos competentes en una determinada actividad y después son otros países los que les sacan el rendimiento. Esto en el mejor de los casos, porque la otra posibilidad es pasar a engrosar las listas del paro. Realmente, es muy, pero muy triste.
Todos lo sufrimos de manera más o menos cercana: hijos, primos, amigos, hijos de amigos, conocidos, etc. que se encuentran ya fuera de España. El hijo de un amigo, arquitecto técnico, está en Londres buscando trabajo, ahora sirve pintas en un pub y mejora el nivel de inglés hasta que le salga algo. El hijo de una vecina ya pasó por esto y ya ha sido contratado como ingeniero informático en una empresa que desarrolla software para la aviación inglesa. La hija de otro vecino es arquitecta y está haciendo sus primeros pinitos en el diseño de edificios en un despacho de Berlín. Una persona muy cercana a mi familia, ingeniero de caminos, desarrolla proyectos de construcción de centrales térmicas y de infraestructuras eléctricas en una empresa española afincada en latinoamérica. Y muchos otros están fuera de España buscando trabajo en lo que sea y, al final, terminan trabajando en algo distinto para lo que fueron preparados. ¿Sigo? Sería aburrido porque la lista no tendría casi fin. Y me refiero a los que están buscando trabajo o trabajando fuera de España, no digo nada de los sueldos que cobran, ni si están viendo cumplidas sus expectativas profesionales. Pero al fin y al cabo todavía es una minoría, porque el resto, o sea la inmensa mayoría, está en el paro. O, como medida paliativa, sobreformándose realizando uno o varios másteres que pagan como pueden, dados los costes de las tasas universitarias (de Wert prefiero no hablar).
El colofón final lo ponen noticias como la que da comienzo el post, la contratación masiva de personal de la enseñanza. O sea, nosotros formamos a los formadores para que estos formen en otros países. Y digo yo ¿no es esta una perversión del sistema? Nuestros maestros, nuestros profesores de secundaria y nuestros profesores de universidad estudian y se preparan para ser formadores de nuestros ciudadanos. Esa es la inversión del país, una buena formación que redunde en la mejora de la calidad de vida de sus ciudadanos, no de ciudadanos de otros países. Porque no se trata de un hecho puntual, que un maestro se vaya a Ecuador a impartir clases, bien porque le apetezca el reto o porque desee cambiar de aires, sino que miles de maestros españoles se van a Ecuador a trabajar para formar a ciudadanos ecuatorianos porque, desesperados, no les queda más remedio.
Nuestros políticos, sí los políticos españoles, esos que no se dan por aludidos, deberían sentir cuanto menos vergüenza de esta situación y poner los medios para que los titulados mejor formados de nuestra historia puedan tener un trabajo digno y acorde con su formación aquí en España. Es evidente que el modelo económico vigente está trasnochado y no funciona, por lo que será necesario reinventar uno diferente en el que la nueva generación de gente formada pueda tener algo que decir ¿se avecina una revolución?
Buenos días Antonio.
Gran opinión la que has aportado. Estoy totalmente de acuerdo contigo. En mi caso, conozco a gente que ha terminado carreras como derecho, ingenieria de caminos, psicologia, incluso magisterio y que hoy en día son dependientes de McDonald’s. Esta gente de la que yo hablo, ahora mismo al igual que yo tienen miedo de tener que buscar una mejor vida fuera de España y abandonar a sus familias (por un corto o quizá largo tiempo) para emprender SU VIDA en otro país diferente. Yo pienso que esto es una vergüenza. Un país que que no se mueve por nada y lleno de politicos corruptos chupando del tarro. Luego la crisis sigue estando al pie del cañón, el paro sigue estando al pie del cañón; pero vemos en las noticias que los que se suponen que van a levantar el país (ministros y presidente) los ves implicados en casos de corrupción o siendo investigados por haber hecho alguna trama.
En definitiva, el día que se levante el país, es muy probable que se avecine, como bien dices, una revolución. Pero a estas alturas ni para una huelga se mueve tanta gente.
Tras la lectura de este artículo, me ha hecho recordar como mi abuela me contaba que en sus años tenían que emigrar para poder darle de comer a sus hijos, entre uno de ellos mi padre. Actualmente, creo que con la situación social y económica en la que nos encontramos en España, esta triste historia se vuelve a repetir.
Los políticos cuando se acercan las elecciones dicen cosas tan maravillosas que a veces puedes llegar a asombrarte, pero ¿Cuál es la verdadera realidad? Engaños y más engaños, está más que comprobado que cada vez que sube un partido político diferente al cargo, cambia todas las leyes, hace recortes, sube las tasas de los universitarios….por lo que podemos llegar a la conclusión, de qué la finalidad que persiguen es mejorar sus estatus y subir al poder. Y mi pregunta es ¿Por qué no utilizan la mayoría de esas inversiones económicas destinadas en sus campañas electorales a juntar a personas expertas en el ámbito de la educación y dar respuesta a las necesidades que se presentan?
Esta situación es una gran tristeza y agonía, porque es una continua lucha para poder formarte y posteriormente desempeñar un trabajo, pero a día de hoy esto ya es un hecho casi imposible, y como bien se dice en este artículo la mayoría estamos destinados a emigrar por un largo período o por el contrario a apuntarnos en las inmensas listas del paro.
En mi humilde opinión, tiene usted toda la razón.
Aún recuerdo cuando estaba yo más pequeña que los padres y amigos se sentaban a hablar sobre la cantidad de inmigrantes que venían a España a “quitarle” el trabajo a los españoles (no perdona, vienen a hacer el trabajo que nosotros no queremos) y en nuestro caso es todo lo contrario, vamos a otros países a intentar trabajar para lo que nos hemos formado y todo porque aquí no conseguimos hacerlo.
Cuando empecé a estudiar la carrera mi madre estaba un poco asustada, eso de que tu hija con apenas 18 años cumplidos deje tu casa y se vaya a otra provincia a estudiar da un poco de miedo. Lo primero que le planteé fue que si no me iba fuera, que iba a estar haciendo durante un año a esperar otra convocatoria para entrar a una universidad más cerca. Lo segundo fue que si no tengo más estudios además de Bachillerato y nada de experiencia laboral de que iba a trabajar durante ese año. Lo tercero fue que si cuando acabase la carrera no encontraba trabajo en España me tendría que ir fuera ¿no?. Parece que a su pesar, entró en razón y acabé en Jaén estudiando una carrera por vocación y que no sé si el día de mañana podré seguir en España o tendré que irme fuera como esos inmigrantes que venían a “quitarnos” el trabajo.
Si fuera así, también podrían discriminarme a mí allí al igual que lo hacemos nosotros aquí, cosa que no me gustaría.
Por último, para reflexionar todo esto planteo esto: nos gusta recibir, pero para recibir, siempre hay que dar y nunca sabemos lo que nos puede hacer falta así que debemos tener un mínimo de respeto por las personas que se encuentran en España porque puede que un día seamos nosotros los que estemos en el suyo haciendo exactamente lo mismo.
Gran artículo. En mi caso, no conozco a nadie de mi familia que haya tenido que emigrar, pero sí que esté en el paro. Y este artículo me entristece, porque, aunque no haya tenido a nadie de mi familia que ha emigrado, sí que lo tendré pronto pues mi hermana se irá a vivir a Londres con el fin de encontrar trabajo de lo que ella ha estudiado, enfermería.
Me parece horroroso y me pone de muy mal humor que muchísima gente esté en esta situación gracias a los políticos, que prefieren gastar el dinero en otras cosas como por ejemplo en sus campañas publicitarias antes que en otras cosas más necesarias como son educación, sanidad, etc.
Hoy en día hay miles de diputados, políticos, etc., y en mi opinión sobra las tres cuartas partes de esas personas. No es necesaria tanta gente para gobernar el país. Y si dijeses que, aunque estén muchos cobran poco… Pero no, al contrario, ganan más que nadie, mientras otras pobres familias se quitan la vida porque no tienen donde vivir.
Lo que sí me hace gracia es la gente de España, que se dedica a criticar a los políticos y a insultarlos porque han robado, pero no se dan cuenta de que eso no sólo lo hacen los políticos, eso lo hace toda España. Son tan hipócritas que no se dan cuenta de que ellos hacen lo mismo, y dentro de ese grupo me incluyo yo por supuesto. Se quejan porque los políticos roban, pero si ellos se encuentran un billete en la calle seguro que se lo quedan, si hacen alguna reforma o compran algo, siempre es mejor no poner el IVA, ¿verdad?, si al hacer la compra o al ir de bares se equivocan al darte la cuenta y te devuelven de más no dices nada, pero como te devuelvan de menos, por muy poco que sea, siempre lo decimos. Yo estoy intentado cambiar eso, y la verdad es que me siento mejor conmigo misma, espero que los demás hagan igual con esta situación. Tengo la esperanza de que se formará una especie de cadena y al final acabaremos la mayoría haciendo lo correcto.
Otra cosa que no veo bien de los políticos es que no saben ni a lo que se dedican, es decir, en otros países, la diputada de educación es una profesora, el de sanidad es un médico, así respectivamente con todos los puestos, pero aquí no. Aquí da igual que hayas estudiado, mientras seas primo del alcalde, hijo de diputado, etc., tendrás un puesto asegurado, y no un puesto cualquiera, uno importante con el que ganes mucho dinero, y mientras, otros pobres estudiamos sin poder permitírnoslo para llegar a ser lo que siempre hemos querido ser, para trabajar de lo que nos gusta por un salario mínimo y seguir pagando los puestos y lujos de esos políticos.
En conclusión, esta situación es muy triste y debería de cambiar, pero no sabemos qué más hacer para que esto acabe, es toda España contra los políticos, pero nunca se hace nada. Por lo que seguiremos teniendo unas grandísimas listas de paro y unas grandísimas cantidades de dinero invertidas en formar a gente que luego no aportan dinero porque tienen que irse a trabajar fuera del país, es de locos, lo sé, pero es España y no hay que esperar mucho más de esta situación.
A pesar de ser un articulo de hace 4 años seguimos en la misma o peor situación.
Me parece indignarte que los jóvenes de hoy en día estemos sobre cualificados y tengamos que abandonar nuestro país por la escasa oferta laboral que este nos oferta.
En mi caso, soy Licenciada en Pedagogía con un máster en Educación Especial y en estos momentos realizando el Máster del profesorado. A pesar de mi formación parece que en este país no existe un trabajo acorde a mi titulación. Por ello, me planteo el irme fuera para poder buscar nuevas oportunidades.
El gran problema de esta situación es que se está destinando los fondos públicos para otros temas que poco solucionan el problema de paro que existe en España. Concretamente, en Educación y Sanidad, la gran cantidad de recortes que estamos sufriendo perjudica en la contratación de nuevo personal.
Centrándome en el sector que a mi perjudica, Educación, los políticos a través de sus leyes educativas propagan a los cuatro vientos un sistema de calidad, pero…¿Qué es la calidad? creo que esa palabra es demasiado grande para salir de la boca de personas pequeñas, que, como ha comentado anteriormente la compañera, tenemos a políticos que ni si quiera tienen formación en el sector que llevan a cabo.
Podría estar escribiendo horas sobre este tema que tanto me entristece pero de manera resumida, somos la generación perdida. Probablemente, la generación con mayor formación que no le queda más remedio que emigrar, como antiguamente lo hacían nuestros abuelos, en busca de una vida en la que poder trabajar acorde a nuestra vocación.
Espero que dentro de unos años haya cambiado tanto la situación que nadie tenga que volver a comentar este artículo aunque, bajo mi parecer, esto tan solo es una utopía.